Frases

¿Acaso lo has olvidado? Lo arrebatado por la espada debe ser recuperado por la espada. Es la regla de los mercenarios. Nuestra regla.

¡Muere y vive en mi corazón como mi esposa por la eternidad!

Aquellos que persiguen sus sueños avanzan sin compadecerse de nada.

Por mucho que me derrotes, al fin y al cabo eres un pirata.

No existe nadie en el mundo que pueda amarte como yo.

Mis sueños y mi orgullo, puedes quedártelos... Tú eres... la prueba de que existí.

Las heridas se curaran mientras sigamos con vida.

La misión de un padre es creer inquebrantablemente en su hijo.

¡Ah, Sebas-chan! ¡¿Por qué eres tan Sebas-chan?!

¡Qué vergonzoso, Madame Red! ¡Ya no estoy interesada en ti, te has convertido en una mujer ordinaria!

La gente puede resultar herida al seguir o preocuparse por otros y luego ser pisoteado eso es algo cruel

¡No hay sueños reales en este mundo, Hashirama!

No me importa lo que te pasó en el mundo real ¡Me casaré contigo! ¡No me importa qué clase de enfermedad tengas! Aunque no puedas caminar o ponerte en pie... ¡Incluso si no puedes tener hijos! ¡Aún así me casaría contigo! Siempre estaré a tu lado. El "tu" que yo conocí aquí... no es una mentira. ¡Es la verdadera tú! No importa cómo o donde te conozca, me enamoraré de ti. Si puedo conocerte de nuevo, con una posibilidad de 1 entre 6 millones... y aunque tu cuerpo no se pueda mover... Me casaré contigo.

El pasado no es lo que necesita rectificarse, aprendemos del pasado para rectificar el futuro, Braz.

Me pregunto si el mar se teñirá de rojo cuando todos seamos aplastados.

No es que me haya vuelto fuerte de repente, ni tampoco que haya cambiado nada. Lo que pasa es que voy a hacerle frente. Lo importante es el afán de superación que nace de la debilidad.

Dicen que el fuerte controla al débil, pero somos humanos no animales.

La corrupción de la que hablo es traicionar a sus amigos, aliados y subordinados, incluso en un intento por obtener el poder excesivo.

Es por eso que... Decidí ser tu amigo, aceptaría tu tristeza y compartiría tus alegrías. Si te extraviaras del camino te corregiría, si te equivocaras te perdonaría y cuando estuvieras en problemas, estaría allí para ti. Y así, aquel que había empezado a odiar al mundo volvería a amarlo algún día