Frases

Nada podría ser más natural que unas raíces absorbiendo nutrientes de los muertos.

Tengo sentimientos encontrados sobre la esfinge. Ansío su sabiduría, pero no puedo tolerar su secretismo.

Los dracos simbolizan lo peor de Rávnica: un gran potencial, torcido por el egoísmo y la avaricia.

El suelo de este lugar está fertilizado por los restos de los muertos, y el sol apenas penetra la oscura enramada. Planten a nuestros hermanos aquí. Este será nuestro santuario.

La ley domesticó su corazón salvaje. Donde antes ardía la ira, ahora brillan las llamas perdurables del orden.

La vida es una serie de elecciones entre lo malo y lo peor.

La carrera se corre en la mente antes de dar el primer paso.

Todas las cosas regresan a su origen.

Una vez que hayas aprendido todas mis lecciones, te parecerá que el mundo entero se ha abierto a tu mente y nada está lejos de tu alcance.

No reacciones a la violencia con violencia. Desvíala. Dirígela hacia donde no pueda hacer daño.

¿Quieres vencer a los muertos vivientes?, te contaré como vencerles: Uno de sus hombres tiene un cuchillo, tu hombre tiene una pistola, ellos mandan a tu hombre al hospital, vosotros mandáis al suyo al deposito de cadáveres, así es como se vence a los muertos vivientes.

Tu corazón... Su constante palpitar, ¡me da asco! Lo acallaré, como hice con el mío.

¡Enhorabuena! Permitídme que os conceda un título acorde con vuestra asombrosa proeza. A partir de ahora os conocerán como "Los destripadores de esbirros estúpidos, incompetentes y decepcionantes..."

La ley y el deber son la base de la civilización.

No puedes bloquear el camino de los dioses. Sólo puedes desviar la ruta de su viaje por un tiempo.

Las mentiras y el engaño dan resultado, pero la autoridad legítima es la mejor forma de control.

Está todo bajo mi control. Cada sueño trivial, cada gran proyecto, cada alma, cada temor. Todo fluye de mí y a través de mí.

Todo recuerdo de tu existencia será borrado de la realidad. Morirás, y nadie lo lamentará.

Siente el ardor de las nieblas. Domínalas. Ellas devorarán a tus enemigos.

Mi sangre clama la venganza de la sangre de mi pueblo, que solo puede ser vengada con al menos el doble de sangre, o quizás con el triple de sangre, o con un infierno lleno de sangre con toda la sangre en llamas, un infierno en el que lloviera sangre, quizás eso sea sangre suficiente... Pero quizás no.