Frases

En la capital de los muertos, donde ella ya yace... Quiero mostrarle a ella, el último suspiro de su asesino... Retorciéndose en agonía.

Jugar con la vida humana, como quien juega con un videojuego, es imperdonable.

Capitán... Creo que estoy agonizando... Por favor deme una despedida de besos.

Piensa en ello, solo con que un Shinigami como tú viniera al mundo de los humanos, una vez cada siglo, o cada milenio, el mundo cambiaría radicalmente, vuestra razón de ser es el terror.

No, Light, tú no necesitas esas cosas, ya eres todo un emisario de la muerte, además el Mundo de los Shinigami está podrido por dentro, son todos una panda de vagos, que solo matan a los humanos para evitar morir ellos, puede parecerte patético y triste y así es, pero no hay más, los Shinigami han olvidado la razón de su existencia, ya no se paran a pensar, simplemente están allí matando el tiempo. Es por eso que tú. Light, en esencia eres mejor Shinigami que nosotros.

Incluso si el resto del mundo se convierte en mi enemigo... Yo creeré en él.

Desearía que lo que él hubiera venido a robar, no fuera la fuente de la juventud... Sino a mí.

Aunque mi vida no haya sido del todo buena, si vivo lo suficiente... Algo bueno podría pasarme... O algo así.

Un pecado verdadero... No puede ser borrado, sin importar lo que hagas.

Oh, ya está anocheciendo... ¡Me pregunto si debo comenzar a sentir hambre ya!

¡Lo mato! ¡Tengo que matar a este cabrón!

Incluso si fuera a morir... Yo cumpliré la promesa que te hice.

No subestimes mis ojos que pueden ver una panti a una milla de distancia.

No soltaré esta espada, incluso si muero. ¡Esta es la única cosa que puedo hacer para enmendar mis pecados!

Que ironía, sin luces artificiales el cielo es hermoso.

La ciencia sostiene la ciudad, vivimos en una era donde la ciencia lo es todo.

Pues entonces siéntate y disfruta del espectáculo.

Yo soy humano y estoy usando el cuaderno de muerte por el bien de la humanidad.

Pero creo que llamarías la atención volando por ahí, tan solo conseguirías que te pillara la poli.

No hay nada mejor para un Dios que tener alas y poder volar libremente por el cielo. No, de hecho, es uno de los mayores sueños que desde siempre ha tenido el hombre.