Frases de Gintama

Podrías decir que tu ojo es demasiado bueno. Si ese ojo lo ve absolutamente todo, entonces puede perder la visión de lo que realmente quiere ver mientras se distrae.

La mayoría de mujeres se vuelven locas por el dinero, pero hay algunas excepciones que tienen debilidad por los que no tienen un centavo.

La razón por la que esta mano aún no te ha soltado, no es porque vaya a llevarte al más allá ni porque sea un pedófilo, yo soy un feminista.

Aunque admito que estoy impresionado, sigues de pie con una espada atravesando tu corazón, puedo incluso ver el altana fluyendo fuera de ti.

Soy una shinobi que manipula títeres. Yo controlo a la marioneta y ella me controla a mí. Ambas somos la verdadera Momochi.

Lo que cargas en tus hombros solo son accesorios para jugar a la casita. Y ese juego acabara pronto junto con este país. Lo perderás todo de nuevo.

Aunque ustedes tres se junten para vencerme no hay manera que puedan hacer frente a este único ataque.

La de madera la tolero pero no puedo permitirte ir con una espada de verdad, te arresto por posesión de una espada y alteración del orden público.

¿Hacia dónde fue? ¿Qué ve ahora? ¿Será el pasado o será el futuro?

En aquel entonces los pensamientos mundanos de tu impetuoso subordinado se mezclaron, así que te perdí de vista, pero esta vez, no te dejaré ir.

Hasta que esta sangre que mi maestro me dio se acabe, continuaré interponiendome en sus caminos. Así que ustedes deberán seguir peleando hasta que esa alma que recibieron de su maestro se pudra.

Tu objetivo es mi mano con la que empuño mi espada, mi vida como espadachín. Y mi objetivo es tu verdadero ser.

Continuar resistiendo como los discípulos de Yoshida Shouyou.

Es mas interesante intentar matar al Shogun que defenderlo. Me estremezco de solo pensarlo.

Finalmente he encontrado a alguien que nunca antes había conocido en esta vida infinita. Un ser capaz de matarme.

Honestamente yo no tengo ningún defecto y si alguna vez Kagura tiene uno, lo aceptaré y mantendré mi mente abierta.

Será mejor que te apresures o lo que has destruido se comenzará a regenerar poco a poco.

Qué ironía... Todo este tiempo perseguí al que me salvó la vida.

No eres ni leal ni colaborador, y no tienes creencias. Solo confias en tu habilidad.

Cuando un espadachín percibe su propia muerte. ¿Qué pensará?