Habremos perdido sólo en el momento en el que los humanos nos demos por vencidos, en el momento en el que dejemos de luchar por la libertad. Pero mientras sigamos luchando nuestra derrota es incierta.
Izzy: Pero necesitamos una brújula, no sabemos donde está el norte. Tentomon: Yo lo sé. Izzy: ¿En qué dirección? Tentomon: La opuesta al sur.
El grito de Natsu-san realmente me subió el coraje... no el coraje para pelear... sino el coraje para proteger a mis compañeros.
Todo el mundo tiene que vivir con alguna inseguridad. Lo importante es intentar superar esos miedos e inseguridades.
Cuando una persona experimenta algo aterrador no puede pensar en nada más que en sí misma, y sacrificará a quién sea por su propia seguridad.
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Si puedes empuñar una espada significa que estas vivo. Protegemos los sueños, acumulamos ambiciones y sin embargo lo que se derrama es la inocencia. Una persona que empuña la espada por otra, una persona que empuña la espada por sí misma. Lo que hay al final, quizá sea la felicidad.
Como si estuvieran impulsadas por el destino unas personas topan con otras y aunque se trate del inicio de las tinieblas ningún hombre puede desprenderse ya de tal dulzura. ¿Cuándo aprenderán los hombres a manejar los hilos de su propio corazón?.
En este mundo existe algo tan inmenso que se escapa del conocimiento humano por ello la gente adora a los dioses o bien teme a los demonios. Dolor y devoción, llegado el momento uno encuentra algo que le supera ¿será eso también el destino?.
Los hombres miran a los demás y albergan distintos pensamientos. Para luchar por su propia felicidad, para alcanzar sus ideales y al fin y al cabo para sobrevivir. Sea como sea el mundo hay quien no tiene más remedio que vivir en sus ilusiones hiriendo a los demás.
En este mundo existen momentos irrepetibles. Los hombres los guardan en su memoria, sufren por ellos y el dolor les impide sentirse satisfechos pero ¿cuál es el más angustioso, el desconsuelo que encierra el recuerdo de lo ya vivió o el desconsuelo que traerá lo que aún no se puede recordar?
La historia ya ha empezado. El destino rige nuestras vidas y las agita a voluntad. Él estalla, ella alberga otros sentimientos de deseo, ¿qué le deparará el futuro a aquel que solo vive para alzar su espada por una promesa?