Si más allá de mi propia katana ensangrentada y de la vida de las victimas hay una nueva era en donde todos puedan vivir en paz, entonces yo mataré. Mataré... En lugar de los Dioses.
Llevar a nuestros camaradas a la victoria, esa es nuestra estrategia. ¡Que comience la operación Estrella de Hadas!
Matar, aunque sea por una justa causa, no es bueno. Al final solo quedan lágrimas y una espada solitaria.
Esta vez, no funcionará lo de atacar sin pensar. Pero tampoco somos unos cobardes que vayan a dejar pasar esto. ¡¡Somos FAIRY TAIL!!
Mi nombre es Alucard. Humilde siervo de la Organización Hellsing. Voy a sacar la basura... Tienes razón tú no llegas ni a basura, solo eres escoria y no hablemos de tu ridículo disfraz, pareces un payaso.
- Lag, ¿tienes a alguien a quien te gustaría escribirle una carta? - Por supuesto que no. - Entonces, algún día, por favor intenta escribir una. - ¿Por qué? A quien le importa una estúpida carta... - Incluso una sola palabra bastará. Mientras haya alguien que derrame una lágrima de felicidad al recibirla. - ¿Por una sola palabra? - Para quienes viven lejos, una carta contiene el corazón de quien la escribe.
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No soporto a los de tu clase. Aún te falta amor propio para llegar a ser un vampiro, gusano necrófago. Dudo mucho que sepas que eres. Yo tengo mis motivos para servir a mi ama humana. Pero eso no es asunto tuyo.
La preocupación no te ayuda en nada, "todo va a salir bien". Esas palabras solo se usan cuando uno está haciendo todo lo posible para que las cosas resulten.
Por favor, cuéntame todo lo que ocurrió no puedo soportar verte sufrir solo, no es por curiosidad, no sé si estoy en condiciones de hacer algo en este asunto, pero realmente mi deseo es ayudarte.
No quiero verte llorar, no quiero verte triste o verte sufrir. Siempre quiero verte sonreír y hacerte sonreír. Así que, por eso, no importa que me odies. Eso es lo que decidí, aunque duela. La verdad es que quiero seguirte más que a nadie... Pero no puedo.
Soy como un acosador. Lo siento. (...) Siempre ha habido algo pesado en mi corazón, haciéndome sufrir. Pero cuando escucho tu voz o veo tu rostro, algo empieza a ablandarse... Me siento tranquilo.