Los Grandes Juegos Mágicos. Día 3. Pandemónium. Creo que nunca olvidaré los hechos de ese día. Mientras ella empieza a cubrirse con heridas, el hada que debería haber caído a la tierra baila. Aquí está Titania. Como una flor escarlata, floreciendo llena de orgullo.
El primer día de los Grandes Juegos Mágicos terminó. Nosotros, Fairy Tail, tuvimos el peor inicio posible, pero en ese momento, algo aún peor se estaba creando. Varios días después del cierre del torneo, grabaré esto para mi querida Lucy Heartfilia de Levy McGarden.
¿Por qué? ¡Yo prometí que nunca más volvería a ver a mi hermana llorar! ¿Entonces por qué está llorando?
Nunca fue tu culpa que Lisanna muriera, en ese entonces también, sólo estabas tratando desesperadamente de protegernos.
¡La derrota de hoy, es la semilla para la victoria de mañana! ¡Nos levantaremos y les demostraremos a todos quienes somos!
No estoy sola... Ellos están junto a mí... todas sus voces... todos sus sentimientos... este no es solo el poder de una persona... ellos tienen fe en mí... ellos son mi fuerza... ¡Todos ellos me mantienen en pie hasta ahora! ¡El poder de mis amigos fluye a través de mi cuerpo!
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Aunque nuestros caminos se separen debes continuar con tu vida al máximo ... nunca debes considerar tu vida como algo de poco valor y.. nunca debes olvidar a tus amigos que te quieren
Yo seguiré con el camino en el que creo, puede que estemos a miles de años luz, pero nuestros caminos siempre irán en la misma dirección, no lo olvides. Nunca digas Sayonara Liones, no hasta que nos volvamos a encontrar, amigo mío.
La batalla no ha terminado, vagamos a la deriva por el espacio sin ninguna propiedad... Sin embargo, esté es el camino que elegimos. Tras sacrificar a nuestro planeta y a nuestros amigos hemos decidido vivir bajo nuestras reglas, igual que lo samurais, esté traje blanco será mi primer voto. Por el bien de nuestros amigos, quienes arriesgaron su vida por nuestra libertad yo prometo, como último Renho, como última herramienta de guerra, dedicar mi vida a proteger esa libertad.
Siempre escucharé tu voz. Cuando llueva, cuando sople el viento, cuando se marchiten las flores, cuando haga sombra. En todas las señales, no importa cuál sea, yo buscare tu voz.