Frases de Gintama

Solo humanos pueden juzgar a los humanos, no serán las llamas de la guerra las que los juzguen, así que si van a huir, haganlo ahora mismo.

¿Qué son las bolas plateadas? ¿Son esas bolas de las que conceden deseos o son de esas de las que cuelgan? Si hubiera algunas bolas tan útiles como esas que conceden deseos, no habría razón ninguna para nosotros de destrozar un lugar como este.

Los inugamis son guardianes de las venas de dragón que son la fuente de vida del mismo planeta, mientras la vida en ese planeta no se halla extinguido, podrá regresar a ser su guardián.

Tu, el hombre que asesino a su maestro para salvar a sus amigos, y el hombre cuyo maestro fue asesinado por su amigo, incluso después de haber ese dolor entre ustedes dos, tu lucha fue inútil y las tragedias del pasado se han repetido, al final no pudiste cambiar nada, no pudiste lograr nada en absoluto.

Hagan lo que hagan en el futuro conocemos al Shinsengumi, así que deja de hacerte el tonto aquí.

Siempre fue así. Cuando esos dos comenzaban a pelear, era mi trabajo hacer que se detuvieran.

Contra esa cosa, contra ese hombre, que no tiene cadenas de la muerte, solo estar vivo se vuelve un grillete.

Escoge la que mas te guste, escogere cualquiera, no cambia el hecho que estaría luchando una batalla perdida.

Ese día fuimos destruidos juntos con el planeta. Y ese mismo día renacimos junto al planeta también.

Lo importante es como rayos terminamos todos como maniquíes de ropa a la venta cuando lo que estábamos haciendo era perseguirlo.

Deben usar sus vidas para expiar sus crímenes, y cuando esta prisión que los juzgo vuelva a la normalidad, deberán regresar a ella. Si no cumplen con esta promesa y si cometen crímenes afuera, entonces no serán llamas de fuego o humanos que los juzguen, seré yo, un shinigami quien los juzgara.

Puede que hayamos tenido algunos desvíos, pero aun así, sin la ayuda de nadie, solamente con nuestras manos, seremos capaces de recuperar a esa persona, con estas manos de donde fue arrebatado, lo recuperaremos, así es como nosotros, los discípulos de Shouyou, hacemos las cosas.

Seguimos cortando enemigos, pero esto parece no acabar nunca, siguen saliendo de todos lados uno tras otro.

Aunque estuvimos juntos poco tiempo, me agradaba Takasugi. Quiero volver a ver al bueno para nada que era entonces.

Aquí al infierno, a todos los miembros del Kiheitai. ¡Pisoteen a los cuervos hasta matarlos!

La interferencia del enemigo nos dividió en dos.

Nosotros a los que apodaron demonio blanco y taparrabos blanco, en algún momento perdimos nuestra blancura, en algún momento esta ciudad nos ensucio, ambos somos de la misma raza.

Lo que me hace sacar esa conclusión, es que aunque Edo este regresando a como solía ser, algo en este paisaje se ve diferente.

Mejor añade esto a tu base de datos, no preguntes algo tan personal a alguien que acabas de conocer.

Tienes que estar bromeando. ¿Qué rayos está haciendo Takasugui aquí? ¿Acaso ha estado haciendo cosas como estas con una cara tan presumida solo para librarse de nosotros? ¿Con quién estábamos lidiando desde un principio?