Frases de Saint Seiya

Aunque haya perdido mis cinco sentidos mientras perdure encendido el fuego de mi vida yo combatiré

Peleamos juntos para el mismo propósito.

¡No escuchaste mis palabras! Tal vez estés listo para dar tu vida enfrentando a Abel, pero como ya renunciaste a la idea de ganar antes de empezar, eso equivale a perder sin pelear. ¡YO JAMÁS LE TEMERÍA AL COSMO DE UN PERDEDOR TAN GRANDE COMO TÚ!

Esta vez yo voy a protegerte hermano...

Lo lamento, pero nunca he creído en los dioses.

Mientras tengas vida y el don de vivir debes hacer que los milagros sucedan.

La cadena circular de la mano izquierda es para la defensa, y la cadena triangular de la mano derecha es para atacar. Normalmente no difieren mucho en su uso, ¡pero mientras más entre en posición de combate mi cosmos, más claras se hacen sus especialidades! La cadena circular de la mano izquierda forma una defensa impenetrable para defenderme. Y la cadena triangular de la mano derecha detecta dónde se encuentra el enemigo y lo ataca esté donde esté. A mi no me gusta herir a nadie, y por más que ahora sea un Santo, trato de no lastimar a la gente, sólo me defiendo... ¡pero para rescatar a Hyoga, quien es mi amigo y hermano, voy a pasar de la defensa al ataque! ¡Ve, cadena triangular! ¡Tu objetivo no es el Santo Géminis que está delante, sino el hombre que lo controla desde la punta de la otra dimensión! Sin importar a cuantos años luz esté, ¡encuéntralo y derrótalo!

Santos o no santos, vivan conservando la fuerza y generosidad para proteger a los débiles.

Me pregunto a cuantas personas he de lastimar... la justicia no es una excusa, lo cierto es que hiero a muchas personas incluyendo mis amigos. Es verdad lo que me dijo Mime... El resultado de una pelea es que habrá otra y que la paz nunca llegará aún cuando nos esforzamos.

Hay momentos en los que hay que luchar, sin importar las probabilidades.

No me malentiendas Shun. Yo... voy a pelear contigo Shun porque, como tú, ¡soy un Caballero de Athena!

Ríndete o morirás.

Las flores retoñan y mueren, las estrellas brillan pero eventualmente se apagan; todo muere, la tierra, el sol y hasta algo tan inmenso como éste universo no está excluido. Comparado con eso la vida del hombre es tan efímera, como un abrir y cerrar de ojos; en ese instante un hombre nace, en ese corto instante un hombre crece, se ríe, llora, pelea, sufre, regocija, lamenta, odia y ama a otros. Todo es transitorio. Y luego todos caemos en el sueño eterno llamado muerte.

Tú dijiste que ya no quieres combatir por temor a lastimar a los demás... Jamás vuelvas a pensar así porque eso es un error... Si no derrotas al enemigo, muchas más personas saldrán lastimadas... A pesar de que diga eso, la maldad me cegó. En realidad no tengo derecho de hablar sobre la justicia... Pero aún así, si es un crimen matar a los enemigos, entonces liberémonos de todos los malvados del mundo y después aceptemos el castigo de Dios.

Fueron eliminados por ser débiles, en el campo de batalla no debes tener compasión ni de tu ser más querido. Ellos merecen morir, no son dignos de ser llamados caballeros.

Parece que solo nacemos para sufrir y lamentarnos.

La gente vive entre desgracias únicamente.