Atesora tus experiencias de ahora en adelante, pero no te arrepientas de lo que has hecho en el pasado, algún día, tus dolorosos recuerdos te proporcionaran los recursos necesarios para protegerte a ti mismo, y a la gente que amas.
Si no abandonas, estás en el camino correcto. Aunque el lugar al que llegues no sea el lugar que esperabas, simplemente sigue buscando el camino. Si lo haces, al final llegarás sin equivocarte.
Hay tantas verdades como el número de personas que las dicen. Todo puede estar bien o mal a la vez, así pues ... ¿Quiénes son buenas personas? ¿Quién es malo? ¿En quién confiar? No importa lo que oigas de todos los demás, la respuesta se encuentra en tu corazón.
Habrá un significado detrás del sufrimiento al que te enfrentas para ayudar a la persona más importante para ti.
Odio los exámenes, pero... aprendiendo diferentes formas de aprender, agobiándote, llegando al límite... aprendiendo todas las formas de superar estas batallas... esas son las cosas por las que nosotros, los jóvenes, deberíamos interesarnos. El mundo está lleno de batallas y desafíos antes de que nosotros entremos en la "sociedad" en el mundo adulto.
Tienes que ser feliz. Conseguir el cariño de mucha gente, y ser necesario para ellos. Convertirte en una persona que este mundo no sea capaz de romper. Encuentra las cosas que son importantes para ti. Y conviértete en alguien que pueda proteger aquello que te importa.
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Te protegeré. Incluso aunque tenga que morir, te protegeré. Si quieres, te protegeré incluso después de muerto.
Así que deberías saberlo, así que no apartes la vista. "No merezco que me ayuden". "No merezco volver". No pienses cosas como esas. Está bien si eres un poco débil, me has salvado muchas veces, así que demuestra un poco de valor, date la vuelta.
Realmente es una frase misteriosa. Hace que te sientas un poco orgulloso, y también que tu corazón se vuelva fuerte. Así que... gracias. Gracias por volver. Gracias por decir algo tan importante. Gracias por pensar en mi hermano hasta llegar a agotarte. Gracias por preocuparte y pensar tanto en mí. Gracias por cuidarme. GRACIAS.
“Yo no pienso en ti como una niña. Quiero hacerte mía. Toda, incluso hasta la punta de los dedos. Cuando llegue ese momento… quiero que utilices esas bonitas uñas tuyas… para enterrarlas en mi espalda.”
Incluso aunque sé que no estoy siendo justa. Incluso aunque estoy avergonzada. Mis lágrimas no se detienen. No debo volver a hacer algo tan cobarde nunca jamás. Llorando. Haciendo que el chico que me gusta se sienta preocupado. Haciendo que haga lo que yo quiero. Solo porque está haciendo lo que yo quiero no puedo... Probablemente jamás volveré a hacer algo así, así que perdóneme, Dios, Daisy, Hermano.
Gracias, Daisy. No sé tu nombre real, ni conozco tu cara. No sé nada de ti pero está bien. Porque tus palabras gentiles siempre son reales.