Digan lo que digan, siempre odiare a los monos, pero nunca le guarde rencor a nadie en la preparatoria de hechicería, solamente me volví incapaz de sonreír de corazón en un mundo como este.
No busco la deificación, sino un pueblo elegido, varias veces los débiles han oprimido a los fuertes utilizando su mayoría, la insolencia de esos monos es algo que me repugna.
Los seres humanos están en la cima de la cadena alimenticia, aun así imaginan la existencia de seres superiores y los llaman dioses, ¿no es curioso? Los hechiceros existimos sin creencia alguna.
¿Eres el mas fuerte por ser Gojo Satoru o eres Gojo Satoru por ser el mas fuerte? Si pudiera convertirme en ti mis fantasías serian mas realistas, ya decidí como vivir mi vida, solo queda hacer lo que pueda en medida de mis posibilidades.
Yo creo que un gran poder debe utilizarse para grandes fines, ¿no te cuestionas el estado del mundo? En este mundo los hechiceros se ocultan para proteger a la gente normal, en resumen, se estableció una paradoja en la que el fuerte debe acomodarse al débil, es lamentable, el pináculo de la creación ha detenido su propia evolución, es un sin sentido, va siendo hora de que la humanidad cambie su estrategia de supervivencia.
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Cada mono tiene su papel, hay monos que atraen dinero y hay monos que atraen maldiciones, y si se les acaban no me sirven para nada.
Cuando practicas siempre hay que hacer de cuenta que se esta en una batalla real, el dolor o la falta de este influyen mucho en la velocidad de aprendizaje.
Exorcizar una maldición tan grande es casi imposible, pero deshacerla es otra historia, se deben hallar miles y miles de nudos de energía maldita y desenredarlos uno por uno, y eso solo puede hacerlo la persona que esta maldita.
No quería lastimar a nadie mas, intente encerrarme y desaparecer, pero cuando me dijeron que estar solo era muy triste no puede negarlo, quiero relacionarme con otros, quiero que alguien me necesite, quiero tener la confianza para decir que merezco vivir.
Las maldiciones suelen asentarse en lugares donde las personas tienen muchos recuerdos, lugares como las escuelas y hospitales a menudo se recuerdan con emociones negativas, son un receptáculo para ellas, a medidas que esas emociones se acumulan hacen que nazca una maldición.
Las muertes y desapariciones superan las 10,000 al año en Japón, y casi todas son resultado de maldiciones que nacen de la negatividad humana, también hay casos generados por brujos o hechiceros malvados, y solo una maldición puede exorcizar a otra maldición.