Frases de Dengeki Daisy

“Yo no pienso en ti como una niña. Quiero hacerte mía. Toda, incluso hasta la punta de los dedos. Cuando llegue ese momento… quiero que utilices esas bonitas uñas tuyas… para enterrarlas en mi espalda.”

¡Quédate calvo, Kurosaki!

No sirve de nada quejarse, solo tienes que actuar según tus principios.

Tú confiaste en mí y me enseñaste la cruel realidad... Y me encomendaste lo que más querías, y todo sucedió tal y como tú querías... ¿Puedo estar orgulloso de ti yo también? Dejaré que tus recuerdos crezcan, como lo hace tu hermanita. ¿Puedo creérmelo? Souichirou... Ella dice que nos parecemos mucho... Siempre quise ser como tú...

Alguien que se parece mucho a como yo solía ser esta ahí afuera, en alguna parte, ahogándose en la nostalgia. Si pudiera encontrar a esa persona y decirle "Esto todavía no se ha terminado" podría demostrar lo importante que fue que tú me salvaras en aquel momento. Es una corazonada.

Gracias, Kurosaki... Qué estés llorando por mi hermano... Me hace muy feliz.

Simplemente dale la mano a la chica que amas, e iros al infierno juntos.

Es mejor beber el dolor más profundo, que probar el sabor de placeres superficiales.

Te protegeré. Incluso aunque tenga que morir, te protegeré. Si quieres, te protegeré incluso después de muerto.

Todavía hay una forma para que los dos os venguéis del mundo que os ha insultado.

Una respuesta bonita no es necesariamente una buena respuesta.

He decidido que no desearé aquello que no pueda ser concedido.

Por favor quédate a mi lado para siempre. Esa es la única petición que tengo para ti.

Quiero acariciar tu piel, y cuando llegue la hora de dormir, quiero acostarme abrazándote.

Cada vez que estés cerca de mi hermana, debes recordar este dolor. Recuerda los pecados de Daisy.

Me gustas mucho, o quizás te quiero, ¿mucho mejor? No necesito a nadie más que a ti, a nadie más.

A veces cuando nos desesperamos necesitamos a alguien para animarnos. Tendemos a decir enfadados eso que ya hemos escuchado antes.

Por favor, Daisy. Por favor quédate a mi lado para siempre. Esa es la única petición que tengo para ti. Y para ese propósito, voy a mentir, sin importar cuán estúpida sea esa mentira.

Daisy, porque estabas ahí para mí, porque me protegías, estaba feliz.

Incluso si no puedo escuchar su voz, incluso si no lo puedo ver, está bien. Daisy está en algún lado allá afuera por mí. Eso es todo lo que importa.