Frases

Prométeme... que sobrevivirás, no importa qué.

Más adelante tendremos batallas aún más rudas. Pero mientras tenga estos sentimientos... seré capaz de luchar mucho mejor que antes.

Me sorprendo a mí misma. Y pensar que me volvería el tipo de personas que querría sobrevivir por alguien más...

No fui lo suficientemente fuerte para el jefe... No pude llegar a tiempo para Chelsea. Pero esta vez no dejaré que muera nadie más.

He tenido tantos lamentos... ¡Tantos! Pero... ¡Incluso si hay un diferencial de fuerza, tengo que superarlo!

¡El fracaso no es una opción!

Hoy le di con todo. ¡Espero que estén preparados!

Solo miraba hacia el cielo, nadie me ayudaba, y ahí fue cuando entendí... que solo yo podría ayudarme. Y que todas mis desgracias fueron necesarias.

No te escondas tras una máscara.

Aquellos cuyos corazones están llenos de sus compañeros, son fuertes.

La trompeta del diablo es una planta perteneciente a la familia Solanaceae que crece en América Central. Absolutamente todas las partes de esta planta contienen alcaloides tropánicos alucinógenos. Ingerirlos puede provocar fiebre e incluso detener el funcionamiento de los nervios autónomos, los pulmones y el corazón.

Los caparazones de los cangrejos de mar contienen mucho calcio en comparación con los de los insectos porque deben ser capaces de resistir la presión del agua. También son mucho más gruesos. Además, ciertas partes de ellos cuentan con un mecanismo llamado autonomía. Como muchos saben, en casos de emergencia, los cangrejos mutilan sus propias tenazas o patas. Y por supuesto, también son capaces de regenerarlas.

En la Tierra, hay muchas plantas que puedes comer sin importar cuán verdes y apetitosas se vean.

Son incapaces de sentir el dolor, ¿verdad? Entonces, ¿por qué me golpean? ¿Se sienten mal por su camarada? ¿Siguen órdenes? ¿O simplemente les damos asco?

Aunque les arranquemos las cabezas, habrá veces en que su cuerpo seguirá moviéndose. Siempre y cuando el ganglio subesofágico se encuentre a salvo y el conducto a sus pulmones esté despejado. Sin embargo, todo cambia si pulverizo sus gargantas.

Sé que su sistema nervioso sigue funcionando de la manera en que lo hacía cuando eran simples cucarachas. Es decir, el control de su cuerpo no lo asume la cabeza, sino el ganglio subesofágico en su tórax.

Espero que tus alucinaciones te enseñen a sentir lo que es el arrepentimiento.

Ellos perdieron en cuanto decidieron acercarse a criaturas más inteligentes.

Insectos estúpidos. No sienten miedo ni dolor. Es por eso que nunca aprenderán... ¡Infelices!