@vongola

En ese caluroso día de verano, vi una sonrisa tan cálida como los rayos del sol, y una mirada tan fría como el hielo.

Juguemos un poco, veamos quien llega más rápido al infierno.

Quizás seas capaz de huir de los puzzles... Pero no serás capaz de huir de ese dolor por algo perdido. No abandones lo que te gusta. Prométemelo.

Hubo alguna vez un muchacho al que le encantaba pintar. Todos lo alababan por ser tan bueno. Pero no sabía en verdad quería pintar. Sin embargo, finalmente lo encontró. Algo que amaba... Algo que en verdad quería pintar. Un sol en el que pudiera confiar. Una luz.

Tú única opción es tener fe. En la luz y en el futuro.

El amor es agridulce.

Estoy seguro de que todas las personas tienen dentro un medidor que indica cuánto pueden soportar un amor no correspondido. "¿Quisiera saber en dónde está ese medidor para poder arrancarlo de mi cuerpo?"

Ese fue el último beso... Con sabor a cigarrillos.

Ser incapaz de que alguien vuelva la mirada hacia ti... Es desesperante.

Si lo olvidas, te enseñaré de nuevo desde el principio. Así que por ahora, solo piensa en mí.

Shouyou debe estar lamentándose desde donde este. Los discípulos a los que protegió a cambio de su vida, anden con odio egoísta y desperdician su vida.

Sus espadas ya no alcanzan el cielo... No, hace tiempo que se rompieron.

¿Porqué Demonio Blanco? ¿Porqué sigues empuñando tu espada rota?

Mi enemigo esta aquí. Nosotros no hemos cambiado. Para convertirnos en el samurái que queremos ser, peleamos contra nosotros mismos.

Yo no acepto su visión de samurái. No acepto sus métodos. Lo detendré aunque tenga que matarlo.

El que mejor entiende como se siente soy yo. Los dos odiamos lo mismo. Ustedes no tienen derecho a matarlo. Yo soy el único que puede matarlo y protegerlo. Ese es el samurái que decidi ser.

Siento que el tiempo que compartimos me pertenece solo a mí.

Quizás todos tienen una faceta que no quieren que los demás conozcan…

No me dí cuenta del sufrimiento que ella está pasando porque, ella siempre está sonriendo.

Si no te expresas entonces, ¿cómo pueden los demás saber tus verdaderos sentimientos?