Frases de One Thousand Lies

Por eso el problema no es tener una personalidad, sino mantener dicha personalidad constantemente con tal de acallar el miedo a lo desconocido que la sociedad siente, y en consecuencia, nosotros mismos también.

Nervios, envidia, celos, enfado, ira, violencia, desastre. Tenerte más cerca sólo ha despertado partes de mí de las que me avergüenzo, y no puedo remediarlas, son todas culpa tuya. Es todo tu responsabilidad.

Esa es la mayor de todas las verdades de este mundo, la única y más auténtica de todas las realidades que podemos saber de alguien o nosotros mismos, escondida bajo más de mil mentiras.

Es como encontrarse un hada en mitad del lago, una que podría cumplir cualquier deseo, que haría realidad cualquier sueño.

Pero mis palabras caen por su propio peso, guardadas durante tanto tiempo en mi corazón, sólo me quedaba echarlas de la misma forma que tantas veces me las había repetido a mí mismo.

Sólo de una cosa estaba seguro. De la canción de Debussy, de la delicadeza con la que la había tocado. Y de todas las mentiras que quise olvidar.

Mi afición por dibujar no es tanto por el amor del arte en sí, sino porque era una manera de darle forma a mis sueños, a las mil ideas que alguna vez han cruzado mi cabeza, pensando que yo podría llegar a ser todas ellas.

Está loca, sí, pero es una de esas locuras divertidas en lugar de una de esas sátiras con seña que el universo representa tan asiduamente.

No se puede borrar a un bicho raro así como así, ¿qué te crees?

Los ciegos también tienen cosquillas, idiota. Y mis ojos están perfectamente, quitando la miopía, aunque es otra historia.

¿Puedes aceptar una falsa realidad? No existe atrás dado el primer paso, ni tampoco se le puede llamar recuperar lo perdido. Y si a pesar de saber la verdad sigues queriendo ser sincero, ten cuidado.

Es cierto que los lobos en ocasiones, cuando dejan de ser útiles en su manada, se convierten en seres solitarios hasta que encuentren su lecho de muerte.

Aprendes copiando, descubres de otros y otros descubren gracias a ti. Desde nuestros gustos hasta nuestra madurez depende de nuestra relación con los demás y negarlo cuando nos interesa no es lo correcto. Ya que al fin y al cabo, creí que podía dibujar cuando alguien me dijo que le gustaba mi garabato en el margen de un libro.

Solo los niños usarían un argumento tan banal como el "No me importa lo que digan los demás". Porque, ¿sabes una cosa? Si importa. Importa mucho, ya que no tenemos otra forma de conocernos a nosotros mismos sin reflejarnos con el resto.

No es lo mismo hacer garabatos en el margen de un libro a dibujar de verdad.
La expectativas son completamente diferentes, y cuando decides probar a hacer un trabajo autentico, algo real... resulta que no es mucho mejor que ese pintarrajo a pie de página.

Eso no quita que los conceptos sean interesantes. Especialmente con lo complicado que es dibujar fantasía sin referencia.

Si un genio te otorga tres deseos, lo normal es pedir deseos extras, ¿no te parece?

¡Mi nombre es Ciarán! ¡Ci-a-rán! ¡Lo de John es un seudónimo que me invente.

Nota mental: Esta chica es peligrosa aunque bueno, al menos ya no ha pasado el Waterloo.

Tú te cuelas en la casa de la gente y la persigues, yo robo coches. Ya no tienes motivos para tratarme con medias tintas como estabas haciendo, ¿no crees?