Frases de Kuroko no Basket 3rd Season

Dicen que las peleas unen a las personas.

Aunque no me la pases a mí, yo solo puedo ganarle a cualquiera. Desde ese día ya no me la pasas. Incluso este momento se parece mucho más a los de antes. Yo... ya olvide también como recibir tus pases.

No me gusta escuchar a alguien más débil que yo.

No tiene sentido que ganemos cien entrenamientos, si a la hora de la verdad no somos capaces de vencer.

El Rakuzan tiene un tirador mas temible que Akashi.

Eres tan temible, que me vas a hacer reir.

No importa lo que hagan, a mi nadie me detiene.

Vamos por la victoria, ¡destruidlos por nosotros también!

Una carrera con valentía... ¡¡Hacia la meta todavía invisible!!

Ya es demasiado tarde. Ya no tiene sentido hablar del renacer de Kuro-chin, perdió esas poca presencia natural en él. Y aunque su recuperación fuera posible, la diferencia es abismal. Tanto en puntos como en fuerza. No sucederá ningún milagro y aunque sucediera no podrían ganar.

Duerme, Rey veterano.

La luz de la esperanza se a desvanecido por completo. Seirin ya ni siquiera puede ponerse de pie.

¿Lo viste? No hay manera de que puedas vencerme.

Ciertamente, fue una imperdonable y tonta jugada de su parte. Pero aún así, no lo puedo culpar. Porque es por lo mucho que quiere ganar.

Recuerdo algo que me dijo Takao hace algún tiempo. El título de sexto jugador fantasma. Lo siento, pero... no tengo ganas de rendirme todavía.

Era muy molesta y sinceramente demasiado orgullosa, solamente hablaba de ella. Solo le interesaba salir con un modelo que diera renombre. Solo me quitaste una mocosa estúpida de las que hay a montones.

Gracias a ti, Koga, yo también puedo luchar.

En el básquet hay tantas opciones de juego como estrellas en el cielo.

- Yo no conozco la derrota.
- ¿Qué? ¿A qué viene eso? ¿Es una broma?
- Perdona. Solo me vino a la cabeza. No es que desee perder... Solo digo que no sé cómo es y por eso siento curiosidad. No tiene ningún doble sentido.
- Eso es bromear. En tal caso, te enseñaré yo en alguna ocasión.

La victoria de ese día me es más amarga que cualquier otro fracaso...