Tu dijiste que podías volar así que me monte en tu espalda y seguimos la nave, pero de repente se te acabo la gasolina y caímos al mar, por suerte te pudiste enganchar a ese barco, fue totalmente tu culpa que haya visto pasar toda mi vida frente a mis ojos como cinco veces.
Publicada por
La frase ha podido ser editada después de que se haya enviado a moderación.