- Yato: Espero que lo estés cuidando bien, parece que ha pasado algo.
- Hiyori: ¿Cómo lo sabes?
- Yato: Ya te lo dije. El maestro y el shinki comparten cuerpo y mente. ¡Cada vez que me pica es que Yukine ha cedido a una tentación!, así es como funcionan las cosas entre shinkis y maestros.
- Hiyori: Entonces, cuando estabas robándole comida y bebida a mi padre, ¿Yukine-kun también sentía esa sensación?
- Yato: Te equivocas. Ese vínculo va en una sólo dirección: de Shinki a Maestro. Los shinkis... solían ser personas. Y la gente... vive en el pecado... El resentimiento, el miedo, la envidia, la desesperación, la tristeza y la avaricia. Estas innumerables cosas dan lugar a la tentación. Ese inconsciente remordimiento de consciencia residual es lo que fluye hacia mí, mostrándome lo que es correcto e incorrecto moralmente. Presta atención Hiyori, perece que tienes una idea equivocada, así que te lo explicaré. La gente decide lo que es correcto e incorrecto, pero esas normas no se aplican a los Dioses. En otras palabras los Dioses... Pueden hacer lo que quieran, incluyendo dañar a alguien o tomar una vida. Algún día Yukine recibirá su castigo: Un castigo divino.
- Hiyori: Yato... Y-yo, ¡seguiré buscando a Yukine-Kun!
- Yato: Rayos... Y se va tan tranquila.

Publicada por

Esta frase le gusta a

La frase ha podido ser editada después de que se haya enviado a moderación.

Comentarios

No hay mensajes