- Ya lo sabía, ¿no? Todos los juegos necesitan emoción. Pensaba que, como le gustaban tanto los juegos, opinaría lo mismo, señorito.
- Es un juego de tan mal gusto que me dan ganas de vomitar, demonio.
- Me halaga.
Publicada por
La frase ha podido ser editada después de que se haya enviado a moderación.