Una reunión con una amiga se convierte en un cruel truco del destino.
Recuerdos de la juventud renacen tenuemente con la esencia de la amistad. Lo que es traído por los deseos tras un vestido blanco. Son complots internos y una atrocidad sangrienta.
El brillo de una flor, como una piedra, es frió y te vuelve loco.
Y entonces comienza la fiesta.
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