@Hikari

Comprendo que hayas huido de tu pasado. Sin embargo... ¡Al menos no huyas del presente o del futuro!

Como miembro de los Dollars, me quedaré con esto. Nadie la buscará aquí. No creo que Celty descubra que su cabeza forma parte del mismo grupo al que pertenece ella.

Quizás la gente no sea capaz de comprenderse a sí misma. "Lo único que puedes hacer es seguir evolucionando". Las palabras de aquel hombre resonaron en su cabeza. Después de hacer algo tan atrevido, pensó que podría hacer cualquier cosa. No pensó ni por un segundo... que necesitaría tantísimo valor para pedir salir a una chica de la clase.
Tiempo para llegar hasta la chica: 30 segundos.
Tiempo para encontrar a su amigo intentando seducirla: 35 segundos.
Tiempo restante para darle una fuerte patada a su amigo: 45 segundos.
Tiempo para que ella rechace su ofrecimiento: 74 segundos.
Tiempo para que la chica lo invite a comer en el tejado: 78 segundos.
Tiempo restante para que él se enamore de ella...
Tiempo restante para que él se declare...

Soy quien soy, y eso no tiene nada de malo. Los días continúan como hasta ahora. No traen un deseo ni una desesperación excesivos. No ha cambiado nada. Pero me invade un sensación de satisfacción. Yo estoy aquí. Tú estas allí. Si yo soy tu salvadora, tú eres la mía.

Hagamos que el ángel caído bata sus alas.

Bien. Juguemos de nuevo. La siguiente vez, y la siguiente, y tantas veces como quieras. Eso es. Tantas veces como quieras. No es que aquí termine todo. Más bien no es más que el comienzo. Podremos luchar. Con el baloncesto que nos encanta, tantas veces que queramos.

- ¡Puedes hacerlo, Kuroko! ¡No te rindas!
- Ogiwara...
- ¡Eh, Tetsu! ¡Kagami! Ustedes dos, idiotas, ¡Ganaron contra nosotros! ¡Si no ganan a alguien como Rakuzan les daré una buena paliza!
- Aomine...
- ¡Aunque ya lo dijeron, también va por nosotros! ¡Ganen, Seirin!
- ¡Derríbenlos! ¡A Akashi! ¡A Rakuzan!
- No lo voy a hacer ni de bromeando
- ¡No se rindan!

Esa debilidad, te engendro a ti. Solo deseaba ganar, aparte todo lo demás, y perdí de vista porque quería hacerme mas fuerte. Y ahora, tú estas apunto de cometer el mismo error. Quizás nunca podamos borrar nuestro crimen. Pensé que no pasaba nada si me derrotabas. Pero... Parece que eso no puede ser. Porque mi rival era Kuroko. No puedo controlar las ansias de ganar.

Para ganar, estuve apunto de tomar el control. De algo irremplazable.

Entiendo. Por lo tanto... nací yo. Yo los domine de nuevo. El tercer campeonato consecutivo también fue fácil. Una victoria aplastante. El incondicional soy yo. Aunque ellos se conviertan en mi rivales sera lo mismo. Yo continuaré demostrando mi fuerza.

Soy el Seijuro Akashi que decidieron que fuera.

¿Yo... Seijuro Akashi, voy a perder? Imposible... ¡No voy a permitir que suceda!
Lo que conseguí con la victoria lo perderé con la derrota.

Es la primera vez desde que nació, que experimenta la derrota.

A partir de ahora aparecerán los monstruos. Se avecina una tormenta.

No hay evidencia. Aún así, es ese momento, todos lo sintieron. Son los prodigios de la década, la Generación de los Milagros. Ningún jugador se les asemeja. Incluso si apareciera alguno, sería en un futuro no muy cercano, o eso parece. Escucharon el sonido de una puerta. El sonido del la puerta al salón donde solo tales prodigios pueden entrar siendo forzados.

Viven en el pasado.

Estaba esperando esto, sin embargo... Quien diría que un vez más la "Generación de lo Milagros" volvería a jugar en un mismo equipo.

La situación nos ha atrapado en la obscuridad. En un abrir y cerrar de ojos, el último tenue rayo de esperanza se ha desvanecido.

Su melodía emociona el alma, su silencio desgarra el cuerpo.

El sol no revela la verdad. Su luz tan sólo nos quema y nos ciega.