Frases de Free!

-Como siempre Disfruta mucho nadar.
- ¡Sí! Como un delfín.

La victoria solo viene a los que creen en si mismos.

Makoto, gracias por estar siempre a mi lado.

A los diez años te llaman prodigio, a los quince genio y a los veinte una persona ordinaria.

Cuando crees que has encontrado todas las respuestas, la vida te sorprende cambiando todas las preguntas.

¡No se acobarden! ¡No tienen que pensar en lo que vendrá! Solo sean libres. Libres.

Un genio consta de 1% de inspiración y 99% de esfuerzo.

No has escuchado el dicho "si no trabajas, no comes".

No necesito depender ni competir con nadie. Sólo necesito estar solo bajo el agua.

La concentración podría ser llamada fuerza de los sentimientos.

La fuerza de los sentimientos puede hacer que la gente crezca.

Las cosas como las hipótesis y los ideales se interponen y hacen difícil ver las cosas con claridad.

A menudo la gente no se entiende a sí misma.

Cuando llegaba el miedo, su cuerpo se tensaba y sus pensamientos se detenían. Era lo único que podía hacer para luchar contra el miedo: dejar de pensar.

Los niños que no escuchan se queman las manos.

El voto de la mayoría no siempre puede ser llamado justicia.

El cielo está despejado porque el viento sopla.

El agua está viva. Incluso cuando la superficie del agua se extiende en silencio, cuando ni siquiera las ondas débiles pueden verse, sólo contiene la respiración, como si estuviera esperando a su presa. Y, si entras en ella, provocando simplemente una leve salpicadura, en ese mismo instante ella sacará sus colmillos y te atacará. Se envolverá alrededor de tu cuerpo, tratando de robar la libertad de tus extremidades. Cuanto más se lucha, más fuerte y persistente se vuelve, y en poco tiempo, todas tus fuerzas se agotarán. Sin embargo, si no luchas contra ella, el agua estará en calma. A partir de ahí, clavas las puntas de tus dedos en la superficie y creas una grieta, entonces, haces que tu cuerpo se deslice por esa grieta: los brazos, la cabeza, el pecho... No rechaces el agua, acéptala. No niegues el agua, reconoce su existencia. Lo importante es sentir el agua; con tu piel, tus ojos, tu alma... Sin dudar nunca de cómo te hace sentir. Cree en ti mismo.