Frases de Jigokuraku

Las ordenes lo son todo para los samurái, pero lo importante es no perder de vista el objetivo prioritario, lo demás es secundario.

Cumplir la misión es mas importante que romper algunas reglas.

Los criminales son reemplazables, si caen es cuestión de juntar otro grupo.

Sentir algo por alguien, ya sean padres o hijos, te harán débil frente a la vida, si no eres fuerte no podrás proteger nada importante.

No es debilidad es fortaleza, no sentir nada es lo mismo que apartar la mirada, no huir de tus sentimientos es la verdadera fuerza.

Como shinobi, nunca debes enfrentar a un enemigo que no comprendas.

Si alguien te ayuda en la vida tienes que darle las gracias.

Hay cosas que desconocemos, la información y la cooperación nos llevaran a la victoria.

¿Se necesita una razón para querer sobrevivir? ¿Se necesita cargar con un gran motivo? No poseo nada de eso, solo quiero volver a casa con vida ¿eso esta mal? No quiero morir joven y bella, eso e todo.

Adaptarse significa cambiar de apariencias según las circunstancias, entender de inmediato la situación y actuar de forma adecuada, en ocasiones hay circunstancias difíciles de entender, adaptarse inmediatamente es una fortaleza.

El mundo no se rige por la ley de supervivencia del mas fuerte, sino del mas apto, ahí reside la verdadera fortaleza.

El mal es pecado ¿y eso que? Eso lo establecieron los Dioses, no yo.

La espada es el alma del samurái, sin ella pierdes el espíritu del clan, aunque es una medida valida en una batalla, en la guerra las espadas son desechables y se pueden recoger del campo.

Se muy bien que soy débil e inmadura, pero yo quiero decidir como vivir, no importa si se es hombre o mujer, o la posición social, ¿no es un anhelo que cualquier persona lleva consigo?

La muerte, tranquilízate, debo enfrentarla con sangre fría, controla tus emociones y usa la razón, calma, tranquilízate y deshazte de las emociones fuertes, no los separes en dos, deja ser a los opuestos, acéptalos así, las emociones y la razón, usa las emociones como tu fuerza, usa la razón como tu visión, que no sean ni calma ni ira, sino el equilibrio.

Es de sabios relajarse cuando es posible.

Están en el reino de los Dioses lo crean o no, el destino de los que vengan a la isla es voluntad de los dioses, por eso no es nada fácil escapar de aquí.

La batalla de la vida es vivir en paz, ser honesto y defender fielmente tus ideales, a veces vamos con la corriente y otras en contra, pero nunca hay que dejar de aferrarnos a la larga batalla de la vida.

Lo insignificante llama la atención cuando hay algo fuera de lo común.

Si la espada es quien elige a quien cortar se podría desviar de toda moral.