Frases de Sengoku Basara Two

Un peón no dispuesto a sacrificarse no merece estar en el tablero.

El mundo esta lleno de batallas, incluso si la guerra termina, las personas deben continuar luchando.

Uno debe aferrarse a su ultima carta hasta el ultimo momento.

Guerras, saqueos, apego al presente, todo corresponde a la naturaleza humana, después de todo, los humanos solo son cosas que comen cosas, piensan cosas y dicen cosas, mientras seamos cosas tratamos de llevar a cabo hazañas para así un día regresar a ser nada, no hay excepciones para esto.

Una ardiente alma no muere, el poseer la sangre en llamas es eterno, no importa que, si lo valoras, incluso en una cosa un alma puede residir.

Un barco pirata no es lugar para gente honesta, es solo para sujetos rudos que están preparados para ir a sus acuosas tumbas en cualquier momento.

Incluso podrías decir que fue obra del karma, en estos turbulentos tiempos de dominación nacional y ascenso a la capital, tu no eres mas que una herramienta de matanza para aquellos hombres que se dignan de llamarse jefes de guerra y que se dejan tentar por sueños de conquista.

En días pacíficos, uno pueden ser capa de tomarse el tiempo para madurar, pero en esta era, donde no puedes ver un mañana, es muy difícil aprender a ser un general una vez que ya te has convertido en uno.

Un dragón que no surca los cielos también es capaz de morir.

Para cambiar este país, para controlar todo, primero debo dejar ir todo lo que poseo, la fuerza lo es todo, la fuerza absoluta es lo único que puede cambiar a este débil país.

Las personas no viven por el bien del país, ellos viven para su propia felicidad, cuando otras personas ven esa felicidad, también los hace feliz.

Tu debilidad, tu ingenuidad, llevaría a la tierra del son naciente a la ruina, aquellos tontos que sonríen serán eliminados y solo los fuertes sobrevivirán, la fuerza debe construir el futuro.

Así como nos comunicamos entre nosotros, como nos convertimos en amigos o peleamos, los lazos que formamos crean nuestro mañana.

No importa como sea el mundo, las personas siguen siendo las mismas.

Las fuertes organizaciones se basan en la racionalidad, los fuertes construyen el mañana, esa es la única verdad.

En este mundo devastado por la guerra, donde la paz de las personas es arrebatada, donde los ancianos, las mujeres y los jóvenes sufren ¿a cuantos enemigos debo asesinar antes de vislumbrar un mundo pacifico? ¿Cuantos aliados debo perder?

Los actos de los débiles no tienen sentido, esa es la única verdad de este mundo.

La debilidad es pecado, la debilidad no puede obtener nada, yo obtendré poder.

Apareciendo a mitad de la montaña diciendo que son piratas, no había escuchado una broma tan mala.

Entrega un tesoro a diez personas y obtendrás diez respuestas diferentes de apreciación.