Ahh... Puedo oírlo... Puedo sentir los latidos de Asahina... Sus manos... Sus labios... Su voz... Su respiración... La pasión exasperante... Me absorbe... Y me perdí en Asahina...
- Espera... ¿Este es el cielo de tus novelas? - ¿Cómo lo sabías? - Bueno, me dio esa impresión... - Ya veo. - Tenía exactamente la misma vibra como la novela que leí a escondidas en el cuaderno de Usagi. Técnicamente tenía un final feliz, pero de alguna forma estaba lleno de soledad. Así que pensé... ¿Cómo se sentía Usagi, mirando este cielo?
Usagi-san está diciendo constantemente que no puede hacerlo sin mí, pero tal vez la verdad es que yo no puedo hacerlo sin él.
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Ya que he vivido en Inglaterra hasta que tenía diez, los veranos japoneses eran duros. Gastaba todas mis vacaciones de verano aquí. He observado mucho este cielo. Nunca intenté decirle a nadie sobre esto, pero quería mostrártelo, Misaki. Así que es un presente. Felicidades en tu oferta de trabajo.
¿Qué hago? No pensé que me pondría en esta situación. ¿Qué debería hacer? ¿Cuál es la respuesta correcta? ¿Qué hago? Mi mente está en blanco...
Las manos de Usagi-san normalmente son frías... ¿Así que por qué se sienten tan cálidas? ¿Por qué sus sentimientos vienen directos a mí por tocar piel con piel?
Otra cosa más. Dijiste que eras un idiota, alguien que no fuera bueno en todo... si tu inteligencia es cuestionable, tu apariencia es promedio, y nadie te llamaría eficiente... Pero te amo precisamente por quien eres.
¿Qué debería hacer? Se siente como el acalorado cuerpo de Usagi está fluyendo de sus dedos y se esparce todo a través de mí.
- ¡Cierto, te faltan las habilidades sociales básicas, pero estabas muy bien antes de conocerme! Incluso si no estuviera aquí... - No puedo. Porque ahora te conocí.