Frases de Akatsuki no Yona

Lili, te expusiste al peligro y tuve que encerrarte incontables veces. Pero cada vez... te volviste más fuerte. Estoy seguro de que incluso ahora eres así. Probablemente siempre has sido más visionaria de lo que pensaba. Si es algo que puedo hacer, me gustaría darte un mundo sin guerras.

Me parece como si él dijese "Elige tu destino y llévalo a cabo hasta el final" mientras te da un pequeño empujón.

Ahora soy humano. Incluso si soy odiado y traicionado por los humanos todavía los amo.

No puedo hacerlo aún, pero un día quiero devolverle a Hak su libertad.

Ya decidí vivir y morir por el bien de una única persona.

Siempre quise ser más fuerte. Al principio para protegerme. Después, debía proteger a Hak, quien dio todo por mí. Ahora, es para pagarle a mis amigos, que me han permitió a vivir.

¿Me quieres matar? Es natural que lo hagas. Pero no puedo morir ahora. Porque hay algo que debo hacer.

Llevarse la libertad de alguien es la cosa más fea que uno puede hacer en este mundo. La gente así debería decaer en la suciedad y volverse como rosas espinosas.

Doy gracias al cielo por este día. La luna está hermosa esta noche.

Perdona por alejarme de tu lado princesa Yona.

Siempre odié mi pelo rojo.

Si obedeces las órdenes sin dudar para proteger a tu amo, no es tu mayor deseo sino tu mayor tragedia.

-Yona: Ik-Soo, creo que ya lo sabes, así que te lo diré. Vi a Soo-Won en Awa. Creí que lo odiaba, que no podía perdonarlo, pero no pude tomar la espada.
-Ik-Soo: No importa lo absurdo o incomprensible que parezca, hay amores que no pueden ignorarse. Puedes tratar de detenerlos, pero el regreso de esos sentimientos pueden hacerte perder las esperanzas.

Si puedes encontrar a los dragones de la leyenda, no será por una razón personal... sino por tu destino.

Ik-Soo, eres como mi padre. Eres excéntrico, un llorón y tu cabeza está en las nubes. Pero... eres una persona amorosa.

Sólo diré una cosa: tus manos... son muy cálidas. No sé qué clase de maldición tienes, pero si esa es la mano de alguien maldito, entonces no me importa que tengas una maldición aterradora.

Tú de repente luces como una mujer. Eso me molesta.

Un hombre realmente poderoso es aquel al que no le importa usar trucos sucios para protegerse.