Frases de Nanatsu no Taizai

Tú me hiciste tratar como a un enemigo a mi hermano y respetar a alguien inmundo como Meliodas, tú me robaste tanto la gracia como la justicia, ese es un pecado imperdonable.

Regla número 4 de los siete pecados capitales: "Cuando un compañero esta en peligro, todos los pecados deberán usar toda su fuerza para ayudarlo".

Si sabes lo mucho que duele perder a alguien preciado para ti... ¡No digas que vas a morir tan a la ligera! ¿Lo entiendes, Gowther?

Un hijo no tiene como propósito ser un arma para luchar. Es una manera de unir tu vida con alguien más.

Toda la responsabilidad me pertenece, así que destrúyeme, lo repararé con mi vida pero eso solo no será suficiente.

No es una pesadilla, aun persiste en esta manos la sensación de haber matado a cientos de mis compañeros, el sentimiento de incinerar gente inocente y plebeyos. ¿Quién ha hecho esto?

Esto es increíble, así que este es mi nuevo poder... No puedo creerlo, esto es una pesadilla, esto no es real.

¿Un mandamiento? Si tomo un poder como ese dentro de mi cuerpo, no seré capaz de permanecer en el clan de las diosas, tengo que parar.

Soy Estarossa... ¿Qué estoy diciendo? Tu nombre es Mael... Por fin he matado al mas fuerte de los cuatro arcángeles... ¿Qué me ha sucedido?... Que espectáculo tan patético... ¿Qué rayos estoy viendo? Tiene que haber algo mal conmigo... Dedico esta victoria a mi padre, el gran rey demonio... ¿El rey demonio? ¿Mi padre? Cuanto pecado dentro de esas palabras, oh gran deidad, por favor, perdóname.

Bien hecho, como eres mi hijo, te daré esto como recompensa, el mandamiento del amor.

Mis alas están desapareciendo, esa gracia me fue otorgada por la suprema deidad, esto no puede ser.

Al verte con Meliodas, cuanto dolor sentí entonces, como si mi corazón fuera arrancado de mi pecho.

Para mi hermano, yo era su orgullo y alegría y me hizo increíblemente feliz, y sin embargo tu Elizabeth, nunca me hiciste caso y en su lugar escogiste a ese asqueroso demonio.

En algún punto me volví el mas fuerte de los cuatro arcángeles y el ángel de la muerte, una existencia temida por el clan demonio.

Mi hermano me enseño que no era un pecado matar demonios, que no había mayor justicia que liberar las almas atrapadas en sus sucias células, por eso mataba demonios, tantos que no podía contarlos.

Bien hecho, justo como esperaba de mi hermano menor, te aseguro que tu seras el hombre que me supere.

Te ves igual a tu hermano, pero solo porque estás copiando su peinado eso no significa que te vaya a crecer una espina, sin mencionar tu cabello rizado.

¿Yo estaba teniendo una pesadilla?

Imposible, ¿cuándo fue que dejé de recordar la cara de Mael? ¿Por qué no tengo ninguna duda o sospecha de la cara que no podía recordar?