Frases de Nanatsu no Taizai

Solo he regresado a ser un poco el viejo Meliodas.

¿Que haces aquí en el purgatorio? ¿Acaso Ban el inmortal fue vencido después de todo?

Si me permite ser directa, ¿qué es lo que quieren de mí? Solo puedo asumir que mi resurgimiento sea contingente bajo alguna solicitud.

Griamor mentiroso, ¿qué hay acerca de tu promesa de nunca alejarte de mi lado sin importar qué?

¿Fue realmente capaz Meliodas de deshacerse de sus emociones? No parece nada diferente.

Para mi, con todos aquí, no hay nada que temer.

¿Cuándo hiciste una promesa tan atrevida? Mírate que cosa.

La cosa es que nos salvaste a todos nosotros en la batalla en la capital, ¿cierto? Se que tienes algún poder grande dentro de ti, ¿Entonces que tiene si fallas de vez en cuando? Ni se cuantas veces he fallado en controlar mi ira.

No soy tan idiota, no se me ocurriría por nada del mundo enfrentarte cara a cara directamente.

¿Qué se supone que iba a hacer? No podía dejarte solo en un lugar como este, pero al final pude tener a mi amigo idiota conmigo.

Sin importar lo estúpida que me parecía la guerra contra el clan de las diosas, como líder del clan demonio, luche día y noche en batalla, y Zeldoris, y lo digo humildemente, idolatraba esa versión de mi. Él era muy honesto y extremadamente sincero, aprendió de mi y siguió empuñando la espada por el bien del clan demonio, para ser sincero jamas fui capaz de comprender porque estaba tan desesperado y porque trababa tan duro.

Es por eso que se que eres falsa, la Gelda real nunca me diría que me ama.

Lo siento, pero tengo un compromiso que cumplir después de esto.

¿Hay algún problema? Quizás se cayó una moneda o algo.

No miren así, solo vine a dar un pequeño saludo ya que ha pasado mucho tiempo y hablar un poco.

Esto es tan raro, aunque mis ojos están cerrados, puedo percibir los alrededores tan claramente, siento que pudiera tocarlos, es como si me haya convertido en uno con la tierra, es como si estuviera siendo tragada por la misma tierra.

Cuando conocí a Elizabeth, mi mundo se volteo. La alegría de tener a alguien preciado por mi y el sentimiento de querer proteger a alguien preciado, finalmente comprendí a mi hermano, porque el tenía a una persona preciada por él y a la cual quería proteger.

Desde donde yo lo veo, parece que les tiene algo de consideración. Aún se está conteniendo bastante.

Esto solo significa que ustedes me han concedido a mí, una diosa, su cuerpo como recipiente para el mero propósito de eliminar a los diez mandamientos.

Sabía que tenía que decirle primero Lady Verónica pero simplemente fue muy difícil de decir.