Frases de Amour Sucrè (Corazón de Melón)

No hay nada mejor que la oscuridad para que tu mente imagine la luz.

Si el paraíso es parecido a ésto, quiero morir enseguida.

A veces hablar con Amber es como mandar señales al espacio: Esperamos ver forma de vida inteligente, pero nunca se encuentra nada.

Normalmente me gusta verte sonreír, pero confieso que esta vez me contraria... Porque utilizas una de las cosas que me ponen de buen humor para mentirme.

Cierra los ojos, escucha mi corazón... Late por ti.

Pienso en esto desde hace un momento... ¿Puedo besarte?

No te asustes. Incluso si te pierdes sola, sin que yo tuviese nada que ver, vendría a buscarte.

-¿La extrañas?
-Claro, pero no creo que las personas que nos han dejado quisieran vernos pasar el resto de nuestras vidas llorando.

¡Siempre hay que reír de las bromas de los chicos! Es como no preguntarle nunca el peso a una chica, ¡es el ABC!

¿Puedo tenerte en mis brazos?

El amor puede nacer con una sola mirada...

No es porque no me interesen los estudios, si no porque yo tengo la cabeza en las nubes.

No me gustan los pájaros... excepto los cuervos. Ellos tienen clase. ¡Son oscuros, incomodan a los supersticiosos, y cuando ELLOS pian, lo hacen de verdad!

Si tienes frío, ven a mis brazos... Voy a calentarte.

¿Vienes a presentar tu candidatura para ser mi novia?

- Castiel: No te quedes sola con ese estúpido, eso es todo.
- Sucrette: Te recuerdo que yo me quedo con quien quiero.
- Castiel: ¡Con quien quieras menos con ese estúpido!

- Aún así estoy intrigado... ¿No hay nada que quieras decirme?
- Un día, cierto chico con ropa algo extraña y con ojos de diferente color me dijo que la curiosidad era un defecto muy feo...
- Ese chico es la sabiduría en persona... ¿No crees?
- ¡Sí! Cuando quiere dice cosas muy interesantes
- ¿Solamente cuando quiere?

¿Sabes? Esta pasión es como un veneno que se expande... Quiero sentir tu cuerpo contra el mio.

Cuando la amabilidad esté en rebajas, corre a comprarte una.

¡No, no me daré por vencida! Tú has decidido esconderte, pues bien, yo no. No he hecho nada malo, y ¡se lo demostrare a todo el mundo! Tú has decidido ser cobarde, mejor para ti, ¡pero no me obligarás a actuar como tú!