Vomite tanta comida como pude y estudie hasta que la cabeza me dolía físicamente. Después de entrar a la universidad, me rompí la espalda trabajando en clubes nocturnos y bares de acompañantes. Todo para así poder cambiar mis ojos, nariz, estructura facial... He cambiado cada parte de mi que me desagradaba. Mi cara, mi cuerpo, estilo de vida, escogí cada parte de mi a mi propia voluntad. No quiero ser mandada por nadie nunca mas y no tengo necesidad de un pasado. Tengo sueños que cumplir, dinero que ganar, amor que encontrar y éxito que lograr.