Cuando me convertí en artista es cuando me di cuenta, de que no se puede estar de acuerdo con todo y con todos. Todo creador es sensible, y es fácil herir sus sentimientos. Aún así son presas de implacables criticas, juicios y ordenes que aveces hasta se contradicen. Por eso con el fin de protegerme a mi misma, vestí mi armadura. Porque eso es lo que vestía la heroína que dibujaba en ese entonces, desde ese momento me volví más fuerte, porque se mejor que nadie que todos pasamos por eso, y que no existe profesión que no tenga dificultades. Tú éxito se deberá a cuanto tiempo puedas soportar toda esa humillación o decidir si realmente vale la pena.
Publicada por
La frase ha podido ser editada después de que se haya enviado a moderación.