Colección - Time

Solo porque eres un adulto no significa necesariamente que eres una persona madura.

No he hecho nada malo. Quizá pierda este combate... Pero si lo hago será simplemente porque soy débil, no por haber hecho algo malo.

Yo también he pensado que si no tuviésemos corazón los humanos seríamos más felices. El mundo sería un mejor lugar. Pero las personas, más que ser felices, más que un mundo mejor, lo que desean es tener un corazón propio. Todo eso que va más allá del cuerpo físico y los hace ser quienes son. Si no tuviésemos corazón no sufriríamos. Pero creo que todos preferimos sufrir antes que perder nuestra esencia.

Cuando hay demasiado amor, demasiada compasión, demasiada comprensión, demasiada amabilidad, demasiado agradecimiento, demasiado respeto y demasiado corazón, entonces todo se vuelve una cruel violencia.

Conoces mi lado más patético, y me aceptas a pesar de eso.

Un juego es como la vida. Si no sabes mover las piezas correctas en el orden correcto, se podría acabar tu tiempo para jugar.

Ok. Esto es cool, nuestra relación volverá a empezar desde 0. Al restablecer nuestra relación por fin he recuperado mi paz mental, y después de haberla liberado de la culpa, Yuigahama podrá recuperar su vida cotidiana. Espero no haber escogido la decisión equivocada.

Ahora que esto ha terminado, podremos tener la vida que teníamos antes de conocernos.

Si le das demasiadas vueltas, la felicidad se esfuma.

¿A eso le llamas amor verdadero? Si las palabras de otro hombre te hacen olvidarlo, eso no tiene nada de verdadero.

Si no te declaras, no pasará nada. Hacer apuestas y planes absurdos no trae nada bueno.

Lucho sin ser bendecido por la suerte, sin depender de los milagros o del destino. ¿Que he perdido en cuanto se han repartido las cartas? ¡Eso es sólo lo mismo de siempre!

Las cartas son algo realmente misterioso. No tienen microchips integrados. No puede salir dinero de ellas. No pueden usarse como armas. Son simples trozos de cartón que no esconden ningún truco sensacional. Y sin embargo hacen que los perdedores, perdamos sin remedio.

Perdona por ponerme a llorar así de pronto, es que me siento feliz de que me hayas hablado. Me he pasado toda la vida de colegio en colegio, pero nunca me había hablado una chica. Bueno, supongo que me has hablado porque perdiste a piedra, papel o tijera con tus compañeros... Dime, ¿qué pasa?

No lo entiendes. No se trata de hacer feliz a la otra persona, sino de ser felices ambos, estando el uno con el otro.

Así es el amor. Puedes declararlo o no decir nunca nada. Te puede alegrar o enfadar. Puede ser mutuo o no correspondido, desilusionarte o jugar contigo. Lo puedes olvidar o recordar. Puedes pelear por él o cansarte de él. Puede terminar o durar para siempre.

El cerebro es un microcosmo, creando sus propias historias. La gente entonces vive estas historias.

No quería saber más nada, quise resignarme y hundirme en el fondo del río.

No se puede arreglar una relación solo con decir palabras bonitas, porque los que la destruyeron fueron los hechos.