Frases de Kingdom Hearts 2

Retazos de un sueño que parecen recuerdos lejanos. Recuerdos lejanos que parecen retazos de un sueño.
Me gustaría unirlos todos, junto a ti.

Pienso en ti donde quiera que estés. Rogamos para que terminen nuestros pesares y nuestros corazones se unan. Ahora me pondré en marcha para cumplir ese deseo Y ¿quién sabe? quizá no sea tan duro emprender el viaje. O quizá ya haya comenzado... Son muchos los mundos, pero todos comparten el mismo cielo. Un cielo... Un destino.

Lo importante no es cuantas veces nos veamos, sino cuantas veces pensemos los unos en los otros.

La oscuridad nunca dominará en nuestros corazones.

Quería ver a Roxas. Él... era el único que me caía bien, me hacía sentir como si tuviera corazón, es curioso... pero, tú haces que me sienta... igual.

La luz y la oscuridad son eternas, entonces los que vivimos en la nada somos igual de... Eternos.

¿Lo captas?

Los finales felices son raros y poco comunes.

Naminé: Hola.
Roxas: Hola. Eres tú...
Naminé: Quería verte al menos una vez.
Roxas: ¿A mí?
Naminé: Sí, a ti.

Recuerdos que se desvanecen... Recuerdos que reaparecen...Y un sueño... Sueño contigo en un mundo sin ti.

Pienso en ti, donde quiera que estés...

Saborea la rabia y el odio.

Nuestros corazones están conectados.

La oscuridad vuelve a reinar en este corazón. Los mundos nacieron de la oscuridad... y a ella volverán. El corazón no es diferente. La oscuridad brota de él. Crece... y lo consume. Esa es su naturaleza. Al final, todos los corazones vuelven a la oscuridad de la que surgieron.

Roxas, los incorpóreos como nosotros solo somos seres a medias, no desaparecerás. Volveremos a vernos algún día, Roxas, quizá tu no sepas que soy yo ni yo sepa que eres tú, pero volveremos a vernos, algún día, pronto... ¡lo prometo!.

Escucha. Por muy lejos que me vaya, volveré.

El regalo más bonito que pudiera desear, Jack, es estar contigo.

- Roxas: Un momento, ¡Tu eres la chica que le gusta!
- Kairi: ¿A quién?
- Sora: ¡Que raro que me hayas olvidado Kairi!
- Kairi: ¿Quién eres tú?
- Sora: A ver, te daré una pista. Mi nombre empieza... ¡¡por "S"!!

- Perdona por lo que le hice.
- Cuando la encontremos, podrás decírselo tú mismo.
- Creo que paso. No podría echarle corazón, ¿sabes? No tengo.

Soy pequeño, letal y legendario.