Frases de Katekyo Hitman Reborn!

Es la última fiesta. Vamos a disfrutar tanto de la vida como de la muerte.

-De algún modo he decidido que me gustaría tener una vida un poco más larga... He vivido de una manera para no tener lamentaciones cuando muera... Pero ahora quiero verte crecer un poco más... Así que, déjame vivir, Tsuna. Quiero vivir más. ¿Me harás este favor?
-Por supuesto... ¡¡Por supuesto!!

La historia de la humanidad es una historia de batallas, después de todo.

Mátame. Si fuera capturado por la mafia... Preferiría morir.

Este tío... Cuando no está en una batalla de verdad... Es un completo cobardica...

Aquella persona que trata el beisbol como algo mas importante que sus amigos ya no está.

Llegará un día en el que apreciarás tenerme de tu lado.

Haced lo que queráis. He perdido la paciencia, pero haré honor a mi promesa con el noveno y no interferiré... En las batallas de mis estudiantes.

Ellos no lo entienden... ¡Ese sentimiento espantoso de ser arrastrado!

No tengas miedo. Sólo si tu vida corre verdadero peligro, serás capaz de emplearte a fondo.

¡Si tu tambien eres un hombre, actúa cuando sea el momento de actuar, Sawada Tsunayoshi! ¡Maldición!

Aún eres joven, entiendo porque no temes a la muerte.

Una fuerza flexible... Una voluntad inquebrantable...

Continuamente en el corazón del ataque, la furiosa tormenta que nunca descansa.

Somos jefes de la mafia, no podemos juzgar o discriminar a nadie basándonos en su apariencia. Lo que importa es lo que hay dentro.

Sacrificar carne para proteger el hueso, buena decisión chico bomba.

- ¡Yo me encargaré de la recuperación de Hayato! ¡Si se van a meter en mi camino, haceos a un lado!
- Si tú lo dices... Se recuperará de una cosa y morirá de la otra.

¡Si mis palabras no te llegan, entonces mis puños lo harán!

- Eso me trae recuerdos de cuando se formó nuestro grupo de guardianes, se nos dijo que un grupo de críos no llegarían a nada.
- Sí, lo recuerdo, ponte en mi lugar y piensa en todo lo que he tenido que soportar a causa de tus locas payasadas.
- Y, sin embargo, te quedaste junto a mí contra viento y marea, estoy muy agradecido.
- Un poco tarde para eso, no me arrepiento de eso ni un segundo.
- Sí...