Frases de Gintama

Entiendo que aunque me haya convertido en un cadáver para que ustedes pudieran avanzar, ustedes han seguido estando ahí.

No había necesidad de decirle, ni nadie tiene porque saberlo todo. Todavía no puedo simplemente morir, tengo que pararme, tengo que ponerme de pie y ser el Takasugi en el que ellos creen.

No estamos tan desesperados como para pedirle la ayuda a un conejo.

En vez de mil seguidores un hombre solo necesita una mala influencia.

Las venas del dragón han sido selladas en esta área, ya no podrás absorber energía para regenerarte.

Mientras tengas eso en tu poder, no se detendrán en perseguirte, no importa el lugar a donde vayas.

Sin excepción una gran cantidad de altana fue robado de muchos planetas, ya van 13 países, todavía no tenemos la mas mínima idea de como lo hicieron o que organizaciones es la que lleva a cabo estos actos terroristas por toda la galaxia, esos planetas donde los crímenes fueron cometidos no tienen conexión alguna con los demás, simplemente un día surgió una secta, cometieron terrorismo y después se suicidaron.

No podemos volver a esos días otra vez, esa clase de ser en que aquel hombre se convirtió, esa clase de seres en los que nos transformamos.

Parece que llegue aquí mucho antes que ellos, sus espadas ya no están siendo blandidas por o para el pasado, ahora se blande por aquellos a su lado y por el futuro.

Soltando las mismas risotadas que ahora, ese hombre surco el mar de estrellas con los bolsillos llenos de piedras.

Que irónico. Este hombre llego a la cima de un país pero quedo completamente solo. Pero ese hombre cuyas alas fueron cortadas y cayo a la tierra, sus camaradas se reunieron aquí.

Esto no sera una guerra, solo sera un simple sacrificio ceremonial.

Ougai, que estos monos te hicieron pasar momentos difíciles. ¿Es que acaso no puedes usar ni un poco la cabeza cuando peleas?

¿Crees que estar rodeado al norte, sur, este y oeste por las heroínas de Ichigo 100% es lo que más te conviene? Espero que estés listo para un final sangriento.

Yo no estoy solo, el Kiheitai esta vivo junto a ti.

Tampoco creas que nuestra ayuda es tan barata como para regalartela como si nada.

No hay nada mejor que una mujer con algunos secretos.

Esas incontables espadas que destruiste nos abrieron el camino y ahora hemos reunido los trozos rotos y los convertiremos en nuestros colmillos que arrancaran a mordiscos tu inmortalidad, no nos volveremos a romper ni tampoco volveremos a perder otra vez.

Bueno, yo considero a mis robots como si fueran mis hijos, al fin y al cabo yo los armé. Pero mis máquinas son herramientas hechas para el beneficio del hombre, nada más ni nada menos.

¿Por qué soy yo el que está siendo interrogado aquí? ¿Qué pasa con esa cara? ¿Por qué me miras con esos estrictos, pero compresivos ojos?