Frases de Tengen Toppa Gurren Lagann

Escucha bien Simon, y no lo olvides. Cree en ti mismo. No en el mí que cree en ti. Ni en el tú que cree en mi. ¡Cree en el tú... que cree en ti mismo!

No confíes en ti, confía en el tú que confía en mí, porque yo confío en ti.

¡Si hay un muro, lo haremos pedazos! ¡Si no hay ningún camino, yo lo haré con esta mano!

Yo no pienso decir "hasta nunca amigos" ni algo por el estilo. ¡Me voy y punto!

Esta es la historia de un hombre bueno que vivió sin ataduras, amó a los suyos, luchó por ser libre, y de repente... dejó de existir.

Solo se muere una vez, así que no pienso perder, retroceder o lamentarme.

"Cree en ti mismo y no en mí creyendo en ti" es lo que me dijeron, y lo que pensé que era lo correcto... y lo sigo creyendo.

Siempre que estés confuso, yo estaré ahí para espabilarte a ostias.

Nunca tengas miedo de lo que aguarda el futuro, nunca te arrepientas del presente.

¡¿Quién demonios te crees que soy?!

Las personas tienen los ojos delante para poder ver la distancia y poder continuar avanzando.

Los muertos, muertos son. Si los revivimos, interferirán en el camino de los que están por venir.

Cuando tropiezas y no caes, adquieres experiencia.

Mi hermano ha muerto. Ya no está. Pero en mi espalda, en mi pecho, ¡él sigue viviendo en mi!. Mi taladro atravesará el firmamento. No importa que haya en mi camino. Si puedo atravesarlo... ¡es mi victoria! ¡¿Quién demonios te crees que soy?! ¡Yo soy Simon! no soy mi hermano Kamina... ¡Yo soy yo! ¡¡Simon el Excavador!!

Un hombre de verdad nunca muere... ¡Incluso si ha sido asesinado!

No debería depender de alguien que no está aquí cuando lo necesitas.

¡Aunque parezca imposible, hay que echarle huevos!

Todo el mundo comete errores, es normal. Pero, ¿sabes qué?, aunque es lícito que una persona le pegue a otra por haber cometido un error. No hay ninguna razón para castigarse uno mismo, puede que, en el momento, uno piense que no se puede arreglar, pero.. Si sigues viviendo y esforzándote, puedes llegar a enmendarte.

¡Prefiero morir a hacer algo que no quiero hacer!

¡Atravesaremos el cielo con tu taladro, y tomaremos la riendas de ese destino que cada día nos marca un obstáculo más!