Frases de Trinity Seven

Si el mundo esta destinado a ser destruido, seré yo quien controle esa destrucción, esa es mi magia.

Soy una de las Trinity Seven. Busco gente con magia poderosa.

Mi tema es Iustitia, la justicia. Yo elijo lo que es justo.

La magia es algo que va más allá de la humanidad ¿No te parece absurdo que decidamos qué está prohibido y qué no?

Después de todo, quien deseó la existencia de este mundo fuiste tú y nadie más.

Mi tema es el control. El Rey Demonio estará bajo mi control. Y si todo esto ha sucedido por culpa del mundo, controlare el mundo.

Estoy perpleja, no pense que el Rey Demonio de Hijiri intentara convertirme en una de sus amantes.

¿Eres Selina? No, tus pechos me indican que eres Liese.

¡No lo hago por gusto! ¡Me gusta, pero...!

No pierdes el tiempo para hacer las tuyas con chicas que no conoces.

Soy una maga maligna, traicionar a otros es pan de cada día.

Aún me desagrada la idea de dejar a Selina en un mundo como este, pero hay alguien que me salvo e hizo todo por mí. También hay personas que quieren que regrese con ellas. Debo decir que prefiero las cosas así.

La maga maligna de las Trinity Seven, Liese, entra en acción.

Hasta el momento Lilith no ha hecho más que asustarse y sorprenderse.

- Sabes que somos enemigos y que soy mucho más fuerte que tú, ¿verdad?
- Sí, tenía una corazonada. Pero soy un candidato a Rey Demonio de primera.
- Tienes razón, mi querido Arata es un candidato a Rey Demonio.
- Es por eso que me asegurare de que mis manos te alcancen, Hijiri.
- Sí, espero que me alcances algún día, es por eso que acabare contigo en este instante, Arata.
- Bueno, lo veía venir.

- Bueno, siempre nos las arreglamos de alguna u otra manera.
- Así es, mi amo tiene muy buena suerte.
- Es cierto, pero sigue siendo un fastidio.

¿Por qué... por qué pueden reír cuando están en una situación como esta? No podrán salir del espacio que creé. ¡Todos podrían terminar desapareciendo!

No me molestaría quedarme aquí contigo por toda la eternidad, pero me gustaría ir a ver a Hijiri en persona. Además... si no salimos de aquí, no podré darte las gracias.

¡Tu no eres Arata! ¡No eres Él! ¡A ti no tengo nada que entregarte!

Jamás subestimes a una mujer enamorada.