Hoy les hablaré de escoria. Quedan avisados. La mayoría de la gente es escoria, aunque supongo que ya lo saben. Este, aquel... ¡Todo el mundo es escoria! El barrio rebosa de basura. Aun así, hay distintos rangos entre la escoria. Por ejemplo, este es escoria de clase alta. Es un tipo que depende de sus padres para lidiar con sus problemas. "Unos tipos malos descubrieron mi negocio de venta de droga". "Ayúdame, papá". Claro que no puede decir eso. Es una reacción digna de la escoria.
A continuación, veamos este grupo de escoria. Uno que se hace el importante esté donde esté y un mocoso que se hace el valiente cuando en realidad es un cobarde. Los odio.
Casi me olvido de esta otra escoria. ¡Un pirómano que no distingue entre realidad y ficción! ¡Policía, arréstenlo primero a él! ¡Su crimen es su imaginación!
Escoria, escoria, escoria. Me refiero a él. Todos los que están registrados en los Dollars son escoria. Los que se esconden en el anonimato y solo se aprovechan de lo bueno son escoria, sin duda alguna. ¿Yo? Soy escoria, obviamente. Y ustedes, los que me están escuchando, también. El tipo de escoria que más odio yo es este. Para acabar, les presentaré a la mayor escoria de todas. ¡Este tipo no me cae mal!