La chica que paso tiempo en la biblioteca conmigo era muy amable y considerada. Pero se preocupaba demasiado, todos sus grandes sueños y brillantes aspiraciones se encerraban en su corazón. Siempre quise abrir las puertas de su corazón para que la luz pudiese entrar, alcanzará cada esquina del mundo y la dejara brillar en el cielo azul, ese era mi sueño.
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