Colección - Kuroko No Basket

Hice todo lo que pude, y no me duele haber perdido.

Kagami, tienes los pies inútilmente... grandes.

Yo no conozco la derrota.

Una vez más me quito el sombrero ante ti, Shintaro. Y ante el instituto Shutoku. Ninguno perdió su espíritu de lucha. Pero no fue suficiente. Duerme... Oh, poderoso rey.

Puede que en las historias de ficción los que pierden siempre sean los malos. ¡Pero éste es nuestro drama! ¡Y el argumento lo escribimos nosotros!

- ¡Pero no te quedes callado, imbécil! ¡No dejes que se vaya como si nada después de decirte todo eso!
- Bueno... Es que no creo que le falte razón, ¿no crees? Sólo reconozco que son muy buenos.
- ¿Ya olvidaste lo de anoche? Déjate de condescendencias, ¿qué ganas con reconocerles algo, Don "Corazón de acero"?
- Ah, perdón, perdón. Pero no me llames así, hombre...
- ¡Tampoco haces algo que valga la pena hasta ahora, así que échale ganas, "Rey sin corona"!
- Ese apodo tampoco me gusta.
- ¿Dónde está toda esa rabia que te salía por la piel contra Murasakibara, "Corazón de acero?
- Para, en serio.
- ¡Se igual, "Corazón de acero"!
- Para, te digo...
- "Corazón de acero", "Corazón de acero", "Corazón de acero"...
- ¡Te digo que te calles! ¡Me importa poco que seas tú, Hyuga, no me molestes! ¡Los que me llaman "Corazón de acero" son los que tienen el "Corazón de acero"!
- ¿Qué rayos estás diciendo? ¡No te entiendo cuando hablas!

Últimamente pienso que quizá el que los cinco miembros de la generación de los milagros y Tetsu coincidiéramos en la misma época no fue casualidad. No sé si nuestro encuentro tuvo algún sentido, pero... tengo una corazonada.
El que estuviéramos en el mismo equipo; el que pasáramos a ser rivales; el que nos hayamos reunidos todos en este torneo... Si de verdad existe el destino quizá el que ese chico haya aparecido ante nosotros tiene algún sentido. Aunque somos de la misma "generación", él no formó parte del grupo. Tiene nuestro mismo talento, pero fue el último en despertar. El milagro que no se convirtió en milagro... y él es la auténtica luz que se topó con la sombra del destino.

Los que conocen el terror de la derrota, están hambrientos de victoria.

Una sombra no existe sin luz. No importa cuánto pelees, nunca funcionará de otra forma. Una sombra no puede vencer a la luz.

- Kagami-kun, no me asustes así.
- ¡Tú me lo haces todo el tiempo!

Odiar algo que amabas es un sentimiento horrible.