Colección - Naruto

Érase una vez un zorro con nueve colas. Los ninjas se reunieron y sellaron al zorro dentro de un chico, así que los dos tuvieron que pasar mucho tiempo juntos. Una nueva desgracia, el Juubi, resucitó. Pero el chico se convirtió en ninja y con la ayuda del zorro y otros ninjas, se hicieron uno y consiguieron encerrar al Juubi. El chico con el zorro sellado en su interior era el hijo del cuarto Hokage y se llamaba Naruto Uzumaki.

Ya no eres ese zorro, eres mi compañero de la aldea de Konoha... ¡¡Kurama!!

Eres alguien que ha experimentado el mismo dolor y soledad que yo....
Y ese dolor hace que la gente sea más fuerte.
Ese es el motivo por el que cortando este lazo... ¡Obtendré más fuerza!

¡No!, que se queme por completo... Le pondré un final a este retorcido sistema, y crearé uno nuevo...

Alguien que no puede salvar a uno de los suyos no puede convertirse en hokage, verdad Sasuke....

Estás mal, eso no es lo que nos hace shinobi. Nunca lo entendiste, un ninja real es el que perdura sin importar lo que afronte. Déjame explicarte algo, sólo hay una cosa que importa si tú eres un shinobi y no es el número de jutsu que manejas. Si no más bien, el valor de nunca rendirse.

¡Porque tú eres la oscuridad!... ¡En un mundo sin luz las flores solo pueden marchitarse y morir!

Es justo que me robe tu corazón para sustituir el que tú destruiste.

Todo el mundo vive confiando en el conocimiento y la conciencia... Encadenado por ambos... Pero estos son conceptos muy abstractos. Tal vez esa realidad no sea más que una ilusión... ¿No has pensado alguna vez que la gente podría estar viviendo dentro de su propia mentira?

Una historia es tan buena como el giro de sus eventos, sus fallos se deben ver como simples distracciones, son pruebas que pulen tus habilidades. Viví creyendo eso...y a cambio juré que lograría una hazaña tan grande que borraría todos mis fracasos.

Cuando dos ninjas son suficientemente poderosos. Pueden llegar a leer sus pensamientos con el simple ataque a puño limpio.

Uno no puede llorar mucho por una persona que ya murió. llorando no se arregla nada, porque ya está muerta, no cambiaría las cosas, el problema es que no puedo ser niño para toda la vida, siempre tomé mis responsabilidades como algo muy problemático, pero siempre fue porque era un niño al que Asuma siempre protegía. Por eso ahora me toca a mi ser un adulto genial.

El dolor nos hace sentir vivos.

El fracaso no es una razón para abandonar algo en lo que crees.

El lugar en el que piensas y aquel al que sabes que siempre podrás volver, es el que puedes llamar hogar. El lugar al que perteneces.

Muere defendiendo lo que te importa y tu nombre nunca caerá en el olvido.

Todos cambiamos lentamente con el tiempo... Al igual que las nubes en el cielo...

Un día tus amigos te traicionarán y el amor se convertirá en odio, ya lo deberías saber, eres como yo, el odio aumentará y cambiarás, y ahora te espera más dolor.

Recuerda que todo el mundo tiene virtudes y debilidades... Así que no te sientas muy deprimido si no puedes lograr algo.