Quizás debí decirles a todos antes que aunque el ejército de liberación sea aniquilado, esta guerra no terminara. Mientras yo exista en este universo, su destino sera la destrucción.
En un principio pensé que seria retribuido ya que maté a mi esposa por segunda vez, pero parece que tu también fuiste salvado por una mujer.
Ahora mismo definitivamente se como se sienten todos, mientras sientan que ya han cumplido su último deseo, mientras podamos descargar en alguien esa sensación sin importar quien sea.
Si cooperan con nosotros ahora y hacemos las operaciones necesarias puede que no acaben muriendo junto con su nave, pero si les da la gana sigan resistiéndose, tampoco es que este mal.
Entreguen sus armas y rindanse, hemos tomado el control de su cuartel general, ya no pueden usar esa arma absurdamente poderosa y el líder que los ha estado manipulando a todos ya no existe más. Han perdido.
Viendo como están las cosas, aunque esos tipos hayan tenido la suerte del mismísimo demonio, esto seguramente les ha pasado factura.
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Estamos contra un oponente que no puede ser vencido sin tener que pasar nosotros mismos por una experiencia angustiante.
Dejenme derramar toda esta sangre por ustedes, el lugar donde esta carne, esta sangre y esta espada van a encontrar su final sobre sus cuerpos, ese es el lugar al cual debo llegar.
Yo no tengo derecho a guardar luto por ellos, después de haber usado como piso tantos cadáveres me he quedado sin lágrimas por ustedes.
Si consigo pasar por encima de unos cuantos cadáveres más, voy a llegar. Después de pasar por encima de los cuerpos de mis enemigos, yo solo, ¿a qué sitio voy a llegar?
No quedo nadie, las almas de aquellos que confiaron su esperanza y las de todos aquellos que vivieron para cargar con ella, todas están aquí, ninguna se quedo atrás.
Vaya hilo tan delgado de esperanza por el cual han desperdiciado sus vidas. No hay que alarmarse, ya no hay nadie que pueda aprovechar ese hilo de esperanza.