Mi primera impresión fue que parecías solitaria, en un oscuro gris, siempre rezumbando con inquietud, mirando a través del ojo de la cerradura al mundo que te rodea, ahora que estoy solo, no puedo evitar recordarte, tu ser multicolor, junto con el dolor.
Publicada por
La frase ha podido ser editada después de que se haya enviado a moderación.