Cuando Kagura era una pequeña niña estaba tan feliz de verla crecer con cada día que pasaba. Cuando llegaba a casa de trabajar podía llevarme de la angustia a la esperanza el solo verla de pie caminando y aprendiendo a hablar, me pregunto, ¿cuándo empezó a crecer tanto? Honestamente no me hace tan feliz como debería.
Publicada por
La frase ha podido ser editada después de que se haya enviado a moderación.